Disculpad mi sinceridad…
Desde hace días no paro de ver
cometarios sobre los resultados de las elecciones del pasado día 22 de Marzo.
En estos comentarios se culpa a la inconsciencia, al miedo, al desconocimiento,
a la vulnerabilidad de los andaluces; para justificar el triunfo del partido
Socialista.
Está claro que no todos los
votantes, tenemos la capacidad de redactar una tesis doctoral con el argumento
de nuestra elección de voto para reforzar el valor de este. Toda acción genera
una reacción. Y si esta no es afín a vuestras/nuestras pretensiones, habrá que
ver a qué se debe.
…Qué verdad es que antes se ve la
paja en ojo ajeno que la viga en el propio.
Tendríais que parar a reflexionar.
¿No será que no habéis ofertado lo que los electores esperaban?, ¿No será, que
no poseéis la credibilidad que os otorgáis?, ¿No será, que os faltó algo de
transparencia?, ¿No será que la ambigüedad
no convence?, ¿No será que la grandilocuencia no todos la entendemos?, ¿No será
que defender aquí lo que no se critica allá os hace ser desestimados?, ¿No será
que la verdad os queda fuera de alcance?
Poner en tela de juicio, la
decisión optada por los electores es la mayor ofensa que se puede hacer a la
DEMOCRACIA, claro que para eso se ha de ser DEMOCRATA.
El fundamento, el axioma esencial
de la democracia es que EL PUEBLO siempre tiene la razón. Y la critica a su decisión,
solo puede venir de la falsa o no asumida, creencia en la DEMOCRACIA.
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